viernes, 25 de abril de 2008

Trufas de Frambuesa

Como he prometido en el post anterior, aquí os meto una receta, que considero casi tan fácil de hacer como buena de comer, en fin, para pasteleros noveles, golosos patosos y amantes de las frambuesas como yo… tachan!! unas trufitas de frambuesa y pedazos de chocolate de leche (srlummmmp… me relamo)

Ingredientes:

200 ml. nata líquida
100 gr. mermelada de frambuesa (puede ser comprada, pero incluyo la receta abajo)
250 gr. Chocolate sin leche
75 gr. Chocolate con leche
Cacao en polvo

50 ml. Licor de frambuesas o Kirsch (opcional) No poner si van a comerlas niños.

Preparación:

-En un cazo poner la nata líquida, añadir la mermelada de frambuesa y en su caso el licor, calentar hasta que empiece a hervir.
-Apartar del fuego y añadir la cobertura de chocolate, que previamente habremos troceado para facilitar su fusión, mezclando con unas varillas.
-Volcar en un cuenco y llevar al frigorífico a enfriar.
-Romper en pedacitos pequeños el chocolate de leche y reservar.
-Cuando la mezcla de trufa esté fría (yo suelo dejarlo de un día para el siguiente) añadir estos trocitos, así evitaremos que se fundan y podremos encontrarlos al comernos las trufas.
-Con una cucharita de postre, o si tenemos ese utensilio fantástico con el que se sacan bolas de melón y otras frutas, haremos unas bolitas que iremos echando directamente sobre el cacao amargo para que se impregnen pero sin redondear muy bien para que queden más artesanas.
-Para la presentación se pueden poner directamente en una fuente bonita o comprar unas cápsulas pequeñitas que venden en muchos supermercados, eso a vuestro gusto,
-Si tenéis invitados, os recomendaría pasar por la turmix unas cucharadas de mermelada de frambuesa, añadirle un poco de nata líquida para preparar una salsa que quede de un color rosa suave, con una cuchara hacer unos dibujos en el plato y así tener una presentación individual más bonita.

Para los que quieran elaborarse su propia mermelada, os apunto la receta que uso yo para estas trufas, pero os advierto que si la hacéis una vez, nunca más querréis comprar mermelada de frambuesa de un supermercado, dicho queda, luego no digáis que no os avisé.

Mermelada de frambuesa:

Ingredientes:
500 gr. Frambuesas congeladas
500 gr. Azúcar
Zumo de limón

-Poner en un cazo a cocer las frambuesas, el azúcar y un buen chorro de zumo de limón, cuando empiece a cocer dejar unos 20 minutos, removiendo de vez en cuando para evitar que se pegue al cazo. Apartar del fuego y pasar la turmix en caliente. Dejar enfriar y guardar en frigorífico.
-Si las cantidades os parecen muy grandes, siempre podéis reducirlas, teniendo en cuenta que lleva el mismo peso de fruta que de azúcar y que si la cantidad es muy pequeña seguramente necesite menos tiempo de cocción.

Espero que os gusten mucho, muchísimo y que si alguien las hace en su casa, luego me comente qué tal fue la experiencia.

Sed dulces.


Escucho: On the Radio - Jay Jay Johanson
Imagen: Internet

Paris, je t'aime



Regreso pidiendo disculpas por esta larga ausencia y dando las gracias a los más cercanos por no dejar de insistir en que vuelva relatando historias dulces. Llego con algunas cosas que contar, para mí muy importantes y que espero que al menos os resulten curiosas.



No sé si todos habeis estado alguna vez en París, tampoco si os habéis dado cuenta de la cantidad de pastelerías que hay por todas partes, sobre todo en el centro y que encuentras como pequeñas galerías de arte con maravillosas obras expuestas y dispuestas a ser comidas… tal vez la gente "normal" no se da cuenta de esas cosas y que como ya dije una vez, lo mío sobrepasa los límites (de-formación profesional). París es una galaxia aparte en la pastelería, así que este mes, organizamos un viaje de trabajo, tres días en París visitando pastelerías, haciendo fotos, alucinando con todo lo que veíamos, registrando en el cerebro los colores, sabores, probando bollería… Dentro de la ruta, estaba la visita a la casa de Dios, sí, la de Dios, al menos en mi caso lo es, uno de mis Dioses particulares, cada uno cree en lo que quiere ¿no? Estoy hablando de Pierre Hermé, tuvimos la gran oportunidad de visitar su obrador, ver trabajar a sus discípulos, pequeños ángeles, felices sabiendo que trabajan para Dios. Mi adorado Pierre no estaba, siempre tan ocupado, pero nos guiaron en la visita sus dos encargados, muy amables y dispuestos a responder a todas nuestras curiosidades. No puedo explicaros con palabras lo que sentí allí, rodeada de carros repletos de Macarons de intensos colores, entre perfumes amargos de cacao y ácidos de frambuesas… sabiendo que estaba en casa de uno de los mejores pasteleros del mundo, al que apodan el Picasso de la pastelería, el creador de los Macarons más originales que jamás he probado, pequeñas obras de arte de colores y sabores alucinantes que tuvimos la suerte de degustar, en fin, el pastelero al que todos querríamos parecernos. Un éxtasis absoluto. Os recomiendo a todos que visiteis su página web y si teneis la ocasión de ir a París, no dejeis de ir a una de sus tiendas.



El viaje dió para muchas más visitas… Fauchon (espectacular), La maison du chocolat, Gerard Mullot, Le Nôtre, La Durée, Hediard, Jean Paul Hévin, Paul, Sadaharu Aoki (maravilloso) , Lauren Duchêne…. y todas las que fuimos encontrando en nuestros largos paseos, un café aquí , un croissant allí… un viaje para recordar y a ser posible aplicar en el obrador nuevas ideas. Como vereis, sigo tan enamorada, incluso más, de este oficio que a pesar de los sacrificios que implica, me da muchas alegrías.


Espero que os guste mi pequeño relato viajero. En otro post os meto una receta que endulce un poco más vuestras vidas.

Escucho: Miranda - Déjame

Imágenes:1: Tour Eiffel 2: Pierre Hermé 3:Sadaharu Aoki